arte, escribo místicamente, devotamente, como
aquel discípulo de Buncho Tani, Bunyo Tosaka, un Fra Angélico
del Japón, que en la antefirma de un kakemono declaraba haber
practicado, antes de pintar, "la purificación del agua y del perfume"...
Coyoacán, Invierno y Primavera de
1914.
José Juan Tablada.