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FICHA CATALOGRÁFICA
72. Serie de ocho grabados iluminados a la acuarela.
5 1/2 x 8 3/8"
[Al parecer proceden de un mismo libro. Todos presentan manchas de tipos de imprenta y ocasionalmente manchas de tinta.]1) The colonists going to church armed. During the period of the early indian wars.
2) Col. George Washington.
3) Tecumseh.
[Al reverso: "Hijo de un jefe Shawwaneel y gran guerrero indio; [ilegible] inglés / 1812".]4) Indian settlement.
5) Indian war-dance.
6) Gen. Jackson.
7) Trapping the bear.
8) Capt. Benjamin Church.
[Al reverso: "combatió / con los indios / de Maine / & New Hampshire".]
NOTA
En 1923, José Juan Tablada inició la redacción de Historia del arte en México –que fue finalmente publicada en 1927– y otro proyecto, que quedó inconcluso y que llevaría el nombre de "Iconografía de la Ciudad de México" o "Iconografía mexicana". Para ambos trabajos hizo acopio de fotografías, estampas y mapas, que obtuvo en librerías y tiendas neoyorquinas o que encargó al extranjero, por ejemplo, a Leipzig, Alemania. En su Diario, principalmente durante el año de 1926, se refiere en repetidas ocasiones a su colección de estampas mexicanas. Hace anotaciones acerca de la compra, venta, cuidado y catalogación de algunas de ellas, así como de otras de diversas nacionalidades: estadunidenses, japonesas, cubanas, brasileñas, etcétera.
Es muy probable que los grabados aquí reunidos, los cuales retratan escenas y personajes de la historia de Estados Unidos, hayan sido adquiridos durante el periodo que va de 1923 a 1927, en alguna de sus visitas a las tiendas de estampas en Nueva York. No se logró identificar a qué artista u obra pertenecen. En la crónica titulada "Una pasión democrática", a propósito de su revaloración de la filatelia, Tablada narra algunas de sus experiencias como coleccionista:Coleccionar desde preciosas obras de arte hasta autógrafos de celebridades; desde raros minerales hasta flores campesinas disecadas entre las páginas del herbario, es interesarse en la cultura humana, arte o ciencia, de la manera más fácil y cautivadora.Tablada apreciaba las virtudes evocativas y educativas de la costumbre de coleccionar tanto estampas como sellos postales. Si con su colección de estampas mexicanas pretendió mostrar la historia y la cultura del país, muy probablemente encontró interesante conservar las estampas estadunidenses que le narraban gráficamente la historia y la cultura del país en que se encontraba.
Porque el coleccionador no busca sólo el goce en la posesión, sino que persigue también el estímulo de la misteriosa aventura... De lo contrario, bastaría ser rico; pero al comprar en bloque y de una vez, se sacrificarían todos los placeres sucesivos y diseminados en el tiempo que la palabra "colección" implica.
Prueba de la existencia de ese elemento de aventura es que el coleccionador, al hacer admirar sus preseas, refiere invariablemente cómo las obtuvo, por qué serie de coincidencias, sutilezas y verdaderos golpes de fortuna llegó a dar con ellas...
Pero de todos modos, coleccionar es placer de lujo, requiriendo dinero o su equivalente en tiempo, ya que aquello de time is money no es un decir, sino verdad inflexible de la vida moderna...
Quien colecciona careciendo de dinero, ha de suplirlo con tiempo, conocimientos profundos y multitud de sacrificios.
El de mis horas de descanso me fue necesario entre otros para formar la importante colección de estampas mexicanas (siglos XVI a XIX), que me ufano en poseer.
Días hubo en que llegando a una librería de viejo e inquiriendo sobre estampas mexicanas, el israelita me señaló una bodega profunda y polvosa, diciendo: "Allí debe haber, busque usted..."
Y tras de horas de búsqueda salí con una rara estampa, pero por el sudor y el polvo convertido en negro...
Otra ocasión obtuve, por la quinta parte de su valor, la edición "Moctezuma", de Linati: Costumes du Mexique. El judío, hojeándola, notó que le faltaba una lámina y me la vendió como "trunca"; pero no había tal, pues esa lámina, por representar al emperador, figura en esa edición epónima, al principio, como frontispicio... Mi conocimiento del hecho me valió 90 dólares.
Así, mercaderes ignaros me han vendido acuarelas japonesas "como simples grabados" y un libro erótico de Utamaro, como anónimo... ignorando que los japoneses jamás firmaban tales obras, por el mismo escrúpulo que Musset no firmó Gamiani...
Existe, sin embargo, en beneficio del común de los mortales, un expediente para que disfruten del placer y la emoción aventurera quienes tienen poco tiempo y menos dinero y que en el mundo de los coleccionaderos viene a ser como modesto Ford entre los Hispano-Suiza y Rolls Royces, pero que tan eficazmente como los carros aristócratas, conduce a idénticas y fascinadoras comarcas.
Me refiero a la filatelia aludida en el título de estas líneas, como la pasión democrática por excelencia, y he de confesar que hubo tiempo en que no conociéndola la tuve por pueril e insignificante... [El Universal, 6 de febrero de 1931, en el CD-ROM México de día y de noche].
Por otra parte, en una carta a Genaro Estrada, fechada el 18 de septiembre de 1925, el poeta da noticia de un proyecto más que converge con los dos anteriormente mencionados:Tengo otro proyecto, algo adelantado. Hacer un libro con lo que los extranjeros han publicado favorable a nosotros, a nuestras ciudades, a nuestra naturaleza, etc., que podría unirse a la "Iconografía". Como propaganda sería excelente, nada diríamos nosotros, todo lo dirán los extraños... Y hay material precioso! Ya tengo venas de la mina. Desde Fr. Thomas Gage, Ward, el "Chargé d'Affaires" inglés, Madame Calderón de la Barca; Evans, el compadre de Seward; Fay Robinson, que conoció a Guadalupe Victoria; George Ruxton; Stephens; Brantz Mayer; Emory; Leland; Vining, etc. Sólo cito a los antiguos y a otros pocos conocidos, los otros sería prolijo. Todas esas opiniones hábilmente ordenadas afirmarían la simpatía de nuestros amigos y desorientarían, y aun confundirían, a nuestros malquerientes. Los grabados todos de doble interés, artístico e histórico, atraerían al curioso hacia el meollo de la obra.Seguramente, al mismo tiempo que Tablada buscaba recopilar la visión de los extranjeros sobre México, se encontró con las visiones que los artistas locales y extranjeros dieron de Estados Unidos, su historia y su cultura. Otros ejemplos de esta misma situación son las imágenes Big Cañon at Mouth of Diamond River, Interior of a Moquis House y Amérique du Nord.
Podría hacerse en inglés y español y sería una obra que en las universidades, bibliotecas, oficinas y clubes, trabajaría eficazmente por nosotros, sin la aridez de la propaganda rutinaria. Aun los datos económicos y estadísticos cabrían allí en discretos apéndices para los especialistas que quisieran ahondar...
Le dije a Ud. que tuve la fortuna de encontrar el álbum de Linati, de litografías coloridas a mano, sobre Trajes Civiles y Religiosos de México en 1831? Es una maravilla de arte honrado y de verdad. No tiene texto, pero he encontrado la obra de un inglés que parece haber tenido enfrente a Linati para la descripción de esos mismos trajes [Archivo José Juan Tablada, sección correspondencia].
RMS